Soledad

Ángel solitario
Que te postras en mi lecho
Alivia mis culpas

Y reconforta mi pecho.

Dame voluntad de amar
Permite que pueda yo entregar
Mi espíritu, mi ser,
El destello precioso
De mi libertad.

Ángel mío
Protegeme de mi egoísmo,
Aclara mi camino
Para no perderme en espejismos

Llévate mis miedos
Arranca mi temor
Y con tu suave manto
Cubre mi vida con tu candor.

Perdón

Es mi silencio
La espada que corta
Y separa tu vida de la mía.

Es mi silencio
El término de mi odio
Y rencor que no mereces

Puesto que fuiste excelente
Solicito conmigo.
Solaz para mi soledad.

Te doy mi olvido
Con toda la buena intención
De mis latidos

Te doy paz y silencio
Con toda la buena fe
Que me da comprender

Que no puedo amarte
Que sería un error
A tí aferrarme

Porque si al tenerte
No pudiera yo amarte
Rompería yo con mi egoísmo

Ése amor que sí te espera,
Ésa costumbre quizás
De quien ha crecido contigo.

No soy yo quien te espera
Y no puedo serlo
Aunque yo quiera.

Y es porque no te conozco
Fruto de pasión
Lastimera.

Y no sé, creo que no quiero
Conocerte
No quiero saber si puedo
Comprenderte

No quiero decir
Que no te quiera.
Pero tal vez no pueda hacerlo
Como mereces
Como tal vez sueñas...

Tu reflejo

En tu crueldad hallo un poco
De mí.
En cada sinsabor de tí
Reconozco mi propio actuar.

En el dolor que me haces sentir
Con tu indiferencia
He lastimado yo a otras almas
De igual o peor forma.

Vuelves a mí después de un año
De extrañarte
Para dejarme ver nuevamente
Que no pude despertar en tí

El amor tan anhelado,
Tan soñado,
Tan esperado
Que yo misma me he negado.

Gracias ángel cruel y sincero
Que en tu partida me das dolor
Y al mismo tiempo felicidad
Para seguir adelante

Para conseguir ése amor
Que Hasta antes de tí
Me parecía imposible.

Gracias!

Nada

Sólo un arlequín 

Que hace temblar

Tu piel sin alma...

Y que buscas cuando sientes ganas

De caricias y embriagarte de besos

Cuando es sólo tu piel

La que quiere compañía.

No supe hacer florecer el amor

En tus ojos

Ni cariño en tu corazón frío.

O será que Está ocupado

Y no hay espacio para mí

Que tanto quise que me miraras con ternura...

Cuando no soy parte de tu realidad.

Adiós

Adiós y gracias por dejarme vivirte
Adiós y gracias porque en ti encontré
Infinita gracia,
Infinito deseo

Dulce agua en tus besos
Inagotables...
Increíble Cómo tus manos
Cómo tu cuerpo

Han podido inspirar tanto
En tan poco tiempo.
Te quiero y jamás olvidaré
El gran regalo
Que con tu crueldad de hombre
Le diste a mi vida

Para darme valor y encontrar así
Un amor dulce, tierno y de primavera
Lejos de tí.

Ése dulce amor que tú no puedes darme.

Fantasmas

Un arlequín que hace temblar

Tu piel sin alma...

Y no soy yo ésa

a quien tú le dices mi dueña

No soy yo la que comparte 

Tu vida y tu realidad...

Hombre cruel

Que has besado mi boca

Sabiendo que no puedes amarme.

Teniendo mi cuerpo,

Solaz para tus deseos

Tan sólo unas horas.

Soy la noche en tu vida

Soy quien buscas para un momento

Y nada más.

Por eso te digo adiós

Porque no puedes amarme

Y no podrás entender nunca

Todo lo que en mis besos te dí.